Me re enamoré

Ana Patricia Martínez

Es el día más común y corriente. Te veo cansada después de un largo día de quehaceres cotidianos. Te preparas para dormir.

Me dispongo a pasar las fotos que tengo en mi laptop a una memoria externa porque ocupan mucho espacio. Es una tarea que he venido postergando.

Son más de siete mil fotos, representan nuestra vida juntos. No soy muy sentimental ni acostumbro recordar eventos del pasado por lo que esta actividad me da flojera.

Preferiría acostarme junto a ti a ver alguna serie y, quizás tener algo de sexo rutinario pero placentero. Nuestra relación ha caído en la monotonía con el paso de los años.

Pero necesito liberar espacio en mi computadora para poner los nuevos productos de mi negocio. No quiero archivar fotos irrelevantes por lo que comienzo a revisar una por una …

De pronto me doy cuenta de que amanece, sin haberlo imaginado me sumergí en un mar de emociones que yacían dormidas en mi ser.

Yo, el pragmático. He pasado del enamoramiento de nuestra boda, a la ternura del nacimiento y primeros años de nuestros hijos. De la incertidumbre y emoción de ir construyendo nuestro capital, a las metas y el hogar logrados.

Recordé tu belleza juvenil que se ha convertido en una clásica y atemporal hermosura. Me reí de momentos chuscos y felices y sufrí de nueva cuenta con épocas de carencias, problemas, enfermedades y recordé a nuestros seres queridos ya muertos.

Y tú, siempre ahí. Mi fiel compañera. La mejor pareja, inigualable mamá.

Sentí que algo muy fuerte renació en mí, algo que estaba aletargado y que gracias a la necesidad de hacer mi nuevo catálogo, me abrió los ojos. Retomaré nuestra relación con nuevos bríos.

Espero que despiertes para decirte cuánto te amo y agradezco el tenerte a mi lado.