Abril 11

11:30 p.m. Llegué. ¿Tú?

Abril 12

4:55 p.m. Santiago, ¿estás?

5:15 p.m. Santiago, supongo que estás ocupado, ¿podemos hablar? He estado pensando mucho en lo que te hice anoche. No estuvo bien engañarte para vernos pero no sabía qué más hacer. Avísame si puedo llamarte.

Abril 15

10:30 p.m. Santiago, ya van tres días que no sé de ti. Sé que te traté mal esa noche pero creo que merezco al menos que me escuches. No voy a rogarte ni me voy a alterar. Solo quiero explicarte el por qué de mi reacción. Avísame si tienes un rato para tomarnos un café.

Abril 20

2:45 p.m. Santiago, esto es aterrador. Nunca pensé que tu silencio podría ser tan doloroso. Ayer pasé por casa de tu madre y esperé un rato para ver si por suerte me cruzaba contigo aprovechando que sabía que ibas a almorzar con ella. Nunca saliste. ¿No fuiste? Bueno, supongo que no. Te extraño. Sigo esperando tu respuesta. 

Abril 25

7:00 a.m. Santiago, llevo noches sin dormir, estoy muy arrepentida de todo lo que te dije. He preguntado a tus amigos por ti pero nadie sabe darme razón. Me dicen que llevas días sin publicar nada, tenía la esperanza de que tal vez me hubieras bloqueado a mí. Pero veo que decidiste desconectarte de todos. Ya se acerca el cumpleaños de Mariana. ¿No vas a ir? ¡Háblame por favor! Me estoy enloqueciendo, es en serio que lo digo.

Abril 30

3 p.m. Bueno, supongo que desapareciste, que te fuiste de la ciudad, qué se yo. Ayer llamé a tu casa y tu madre me dijo que no podías hablar. Casi le supliqué que te pasara al teléfono o que al menos me contara si estabas bien. Lo único que me dijo es que te deje en paz. ¿Ella sabe lo que pasó? Yo no quiero que nadie lo sepa, Santiago, no quiero. Por favor, si es que me lees, deja las cosas entre nosotros, estoy avergonzada por todo y no quiero ser la mala de esta historia. No lo merezco.

Mayo 20

8:00 am Hola. Voy a irme del país. Pensé que podría importarte. Todos te extrañamos en el cumple de Mariana y yo no supe qué decir cuando me preguntaron por ti. Estuve allí poco tiempo. No soportaba las preguntas de todos y los murmullos entre ellos creyendo adivinar lo que pasó. Carmen me llevó a casa. Quiero que sepas que aún no he hecho lo que te dije esa noche que haría. Me gustaría hablar contigo antes del viaje.

9:14 a.m. Hola Natalia.

9:15 a.m. Hola Santiago.

9:20 a.m. ¿Qué no has hecho qué?

9:35 a.m. No he hecho ESO. 

9:36 a.m. ¿Y no te pareció importante hacérmelo saber?

9:36 a.m. Te he buscado como loca, no me has querido responder.

9:37 a.m. Pero no tenía idea que no habías hecho ESO, Natalia, ¿estás jugando con mi cordura?

1:00 p.m. Tú has jugado con la mía. 

1:01 p.m. Si no lo has hecho, no te puedes ir del país, necesito que nos veamos, dime si estás en casa y salgo para allá.

3:00 p.m. Natalia, ¿estás?

4:30 p.m. Natalia, estoy afuera de tu casa, pero en la portería me dicen que ya no vives aquí. Dime donde estás, no me hagas esto.

5:00 p.m. Te odio. Te odioooooooo. Te odio, Natalia. Dime dónde estás.

Junio 2

8:00 a.m. Natalia, me dijo Mariana que viajas hoy. ¿Te vas a ir así? ¿Me vas a dejar así? Me dijiste que no querías tener a nuestro hijo, que no te importaba lo que yo pensara, que era una decisión tomada, que lo nuestro no podía ser porque yo estaba casado y no te importó que llorara, que me desgarrara frente a ti y te rogara que no abortaras, que también era mi hijo. Y me dijiste que  si no dejaba a mi esposa, no había razones para tenerlo. ¿Te parece lógico? Morí de dolor, Natalia. Y luego tienes el descaro de decirme que no lo has hecho? Me dices como si nada que no has hecho ESO. ¿No abortaste? ¿Qué es lo que no has hecho? Me tomas por un idiota, no te lo puedes llevar, no me lo puedes quitar dos veces. ¿Qué te hice más que amarte? ¿Por qué me haces esto?

8:05 a.m. Señor, no conozco a ninguna Natalia. Hace un par de días me asignaron este número. Siento mucho lo que está pasando. Espero que logre encontrarla.